El tomate es la hortaliza más popular en el mundo, fácil de sembrar y productiva. Te contamos cómo cultivar tomates en macetas.
Alimentación 12 de abril de 2021
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No necesitas grandes extensiones de tierra para sembrar tu planta de tomates, bien puedes hacerlo en tu huerta hogareña. Ya sea en un pedacito de tierra que tengas en tu patio, en cajones de verdura en desuso o en macetas, cultivar tomates es muy simple si respetamos ciertos pasos.
Lo primero que debemos definir es qué variedad de tomate vamos cultivar. Si utilizamos la técnica correcta, cualquier tipo de tomate puede crecer en una maceta. Pero alguna de sus variedades lo harán con mayor facilidad que otras.
Las plantas de tomates pueden ser del tipo determinado o indeterminado, esto refiere a su tamaño de crecimiento. Las más pequeñas, es decir del tipo determinado, se adaptan con más facilidad a la siembra en macetas.
Las plantas más conocidas de tomate determinado son: tomate Río Grande, tomate Pera o Roma, Cherry Gold Nugget.
La capacidad de la maceta que utilicemos para sembrar los tomates en nuestra huerta hogareña dependerá del tipo de planta que hallamos elegido y tu tamaño. El volumen mínimo que debe tener varía entre 16 y 19 litros, en ella crecerán de manera saludable nuestros tomates si pertenecen al tipo determinado. Estos pueden alcanzar un porte final de no más de 35 cm.
Si el tipo de plantas elegida es del tipo indeterminado, su tamaño final puede ser cercano a 1,50 mts; por tanto conviene utilizar una maceta de entre 25 y 30 litros.
Si estas en dudas sobre el tamaño de la maceta que utilizarás para sembrar tus tomates, siempre es mejor que sobre espacio. Un recipiente con mayor capacidad no traerá complicaciones a tu planta y te permitirá agregar más tierra en tu maceta. Así la plata de tomates obtendrá mayor cantidad de nutrientes y logrará mayor retención de agua.
Toda planta, para crecer saludable, requiere de un buen suelo. Un buen sustrato para tu planta de tomates ayudará a evitarte problemas a futuro. Puedas usar sustrato universal, hummus de lombriz o compost.
La planta de tomates necesita de un extra de energía para poder dar frutos, por eso es indispensable contar con un buen fertilizante si decides sembrar tomates en maceta.
Al ser una planta muy voraz, al momento de dar su flor, es ideal que tu planta de tomates cuente con un buen fertilizante de aliado. Lo recomendable es que éste sea rico en fósforo y potasio, pues colaboran en que la planta produzca más cantidad de flores y frutos con un mejor sabor.
Si acabas de incorporar a tu huerta hogareña tomates sembrados en macetas, estos son algunos de los cuidados que debes tener en cuenta.
Lo principal es la temperatura, durante el día la planta de tomates soporta entre 20 y 30 grados y durante la noche entre 1 y 17 grados. El riego y la luz solar son indispensables para su crecimiento, al igual que un buen drenaje.
Por último, dos cuidados más: la poda y el tutorado. La finalidad de la poda es que dejemos algunos tallos guías o principales y eliminemos los brotes laterales. Esto favorece el crecimiento de frutos más grandes y mejores.
Para los tutores podemos utilizar cañas o palos a los que ataremos los tallos, para que la planta se mantenga de pie y erguida durante su crecimiento.
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